Turquesa


TURQUESA 

La Turquesa es una sanadora muy eficaz que ofrece bienestar al cuerpo y solaz al espíritu. Es una piedra protectora y ha sido usada para hacer amuletos desde tiempos inmemoriales. Se cree que cambia de color para avisar del peligro de infidelidad.

La Turquesa fomenta la sintonía espiritual y potencia la comunicación con los mundos físico y espiritual. Puesta sobre el tercer ojo potencia la intuición y la meditación. Sobre el chakra de la garganta libera antiguos votos, inhibiciones y permite al alma vuelva a expresarse.

Es una piedra de purificación. Disipa las energías negativas y limpia la bruma electromagnética, proporcionando protección contra los polucionantes del medio ambiente.

Equilibra y alinea todos los chakras con los cuerpos sutiles y sintoniza el nivel físico con el espiritual.

Según el pensamiento tradicional, la Turquesa une el cielo con la tierra, unificando las energías femeninas y las masculinas. Esta piedra es empática y equilibradora.

Promueve la autorrealización, ayuda a resolver problemas creativamente y calma los nervios cuando uno tiene que hablar en público.

Psicológicamente la turquesa es una piedra que fortalece. Disuelve la actitud de mártir o el auto sabotaje.

Mentalmente la turquesa infunde calma interna al tiempo que mantiene la alerta y ayuda a la expresión creativa.

Emocionalmente, la turquesa estabiliza las alteraciones del estado de ánimo y aporta calma interna. Estimula el amor romántico.

Curación

La piedra es excelente para tratar estados de agotamiento, depresión o ataques de pánico.

·         Fortalece los meridianos corporales y los campos energéticos sutiles.

·         Potencia los Sistemas físico e Inmunitario, regenera los tejidos.

·         Favorece la asimilación de los nutrientes.

·         Alivia la polución y las infecciones virales.

·         Cura la totalidad del cuerpo especialmente los ojos, incluyendo las cataratas.

·         Reduce el exceso de acidez, y problemas estomacales.

·         Trata la gota y el reuma.

·         Esta piedra es antiinflamatoria y desintoxicante, aliviando calambres y el dolor.

Posición

·         En cualquier lugar, pero especialmente sobre la garganta, el tercer ojo y el plexo solar.

·         Con ella se hace un excelente elixir.