LOS CUARZOS Y SUS PROPIEDADES
Los cuarzos están formados por silicio y nosotros también lo tenemos en una pequeña parte.
Nuestra parte de silicio está sometida continuamente a variaciones energéticas por nuestro carácter y emociones. Sin embargo, el cuarzo se mantiene en un estado de equilibrio, por lo que son una ayuda eficaz para nosotros.
Cuando nos encontremos en un nivel de desequilibrio, ya sea emocional, energético o físico, y no seamos capaces de volver al estado de equilibrio por nuestros propios medios, pongámonos en contacto con algún cuarzo y notaremos su efecto.
Ayuda a transmutar lo que no te sirve para así alcanzar el estado de equilibrio que necesitas.
PRIMERA LIMPIEZA
Al recibir una piedra, si no nos la regalan preparada por alguien de confianza, o si la compramos debemos hacer la primera limpieza energética o limpieza de shock. No sabemos que energías puede haber absorbido o que programaciones puede tener. Por eso esta limpieza, la más fuerte, hace tabla rasa con todas las energías que pueda contener el mineral. El método es sencillo:
Escoger un recipiente (bol, vaso…) de cerámica o cristal.
Poner un poco de sal (se puede usar sal gorda o cualquier otra).
Disponer los minerales dentro de otro bol más pequeño o bolsita de plástico y poner éste dentro del anterior sobre la sal. (los cuarzos no deben tocar directamente la sal, hay algunos que por sus propiedades físicas se deterioran o los que tengan algún tipo de metal; colgantes, engarces, etc.)
Dejar reposar 24 horas.
Sacar los minerales, lavarlos con agua fresca corriente visualizando como el agua
se lleva los restos de energía negativa.
Tirar la sal y las energías negativas que haya absorbido..
CARGAR LOS MINERALES
Después de una limpieza energética debemos recargar los minerales de energía. De esta manera sus propiedades terapéuticas estarán al máximo, ya que después de usarlos y de una buena limpieza estarán “exhaustos”. Con Reiki simplemente:
particular.
llena o creciente). Si los dejas sobre tierra (una maceta por ejemplo, tanto mejor)
EL USO DE LOS MINERALES
En Reiki usaremos los minerales para ayudarnos a equilibrar los diferentes chakras. Después de identificar un o dos que debemos trabajar (conversando con el paciente y/o mediante la sensibilidad de nuestras manos) escogeremos el mineral adecuado. Simplemente nos guiaremos por el color del chakra. El mineral se puede dejar sobre el chakra o su área de influencia durante la terapia, o mientras hacemos Reiki en la zona. Nos limitamos al chakra o par de chakras que más necesidad de terapia tengan. Podemos utilizar todas las piedras para nosotros mismos, jugando con ellas, sintiendo su energía, meditando en los chakras...
También podemos entregar a una persona una piedra preparada, según el color de un chakra determinado, a una persona que la pueda necesitar. Simplemente la llevará encima, entre sus cosas, cerca de su cuerpo, y le informaremos de como limpiarla y cargarla de vez en cuando.
CUANDO SE ROMPE UNA PIEDRA
A veces una piedra se nos cae por casualidad, se rompe sola o se ve gastada y descolorida. Esto nos indica que la piedra ya ha cumplido su cometido con nosotros. Podemos considerar que el fragmento más grande todavía es útil (si no es un canto rodado). Cuando no debemos usar más una piedra, lo que hacemos es agradecer todo lo que ha hecho por nosotros y volverla a la naturaleza, enterrándola en el campo, en la playa o dejándola en el lecho de un río
LA ELECCIÓN DE NUESTRO CRISTAL PERSONAL
Tan sólo un cristal muy especial y exclusivo puede emplearse de este modo; normalmente sólo tú puedes tocarlo para que no se mezclen otras energías. Estos cristales personalizados suelen llamar nuestra atención haciéndonos ver que son, sin lugar a dudas, poderosos instrumentos personales.
Si te llama algún cristal, puedes estar seguro de que percibirás su toque de atención.
A veces, tras haberte servido, el cristal debe seguir su camino, dirigiendo sus pasos hacia otros lugares y otras personas para compartir con ellas su luz y energía. Cuando esto ocurra, déjalo marchar.
DIVERSIDAD DE LOS CUARZOS
DRUSAS Y GEODAS
Son una acumulación natural de cristales, y pueden ser pequeños, medianos o grandes. Su forma puede ser plana, curvada o en forma de cueva (a las que se denominan geodas). Las drusas son, sobre todo, acumuladores energéticos. Podemos usarlas para poner en una habitación, en el despacho, o donde notemos que nos pueda beneficiar su energía.
También sirven para cargar y limpiar los cristales pequeños que llevamos siempre encima; bastará con ponerlos durante unas horas encima (si es plana) o en su interior (si es una geoda).
PUNTAS ALARGADAS
Representan la energía masculina, son protectoras y transmiten fuerza y poder. Las más conocidas son las puntas de cuarzo natural que se parecen a una espada, varita o lanza.
PIRÁMIDES
Las pirámides son triángulos vistos en perspectiva y su fuerza se encuentra en el ápice o punto de convergencia de los triángulos. La energía que emite es de renovación y regeneración.
FORMAS TALLADAS
Los cristales y minerales tallados con calidad de gema sirven para engarzar y ponerlas en contacto directo con la piel (pulseras, colgantes, pendientes, etc…). Algunas tienen la propiedad de reflejar toda la luz que les llega; transmitírnosla a nosotros. Muestran un esplendor especial, gracias a quien ha sabido sacarle todo su potencial de gema, esto se ve sobre todo en los diamantes.
Si no hubiera alguien que le hubiera dado esas facetas y sacado ese brillo, son como piedras un poco vastas incluso … Aunque también nos podemos encontrar con lo opuesto, que es el que han manipulado tanto que le han modificado en lo esencial, con lo que habrán perdido parte (si no todo) su poder, fuerza e identidad cristalina. Pero seguro que nos aportarán algo, ya que no hay que olvidar que sigue siendo un mineral.
Los tallados con formas de animalitos, varitas de poder, lunas, corazones; sirven para que los niños se sirvan de su energía o conectar con nuestra parte más tierna. Y si son tallados con formas de poder (como pirámides, budas, cetro, etc …) aporta la frecuencia elevada de la forma a la de la cualidad que tenga el cristal.